Alejandro Linares, Un Repartidor Venezolano que había llegado a Miami apenas cuatro días antes con la esperanza de ofrecer un futuro mejor a su familia, fue asesinado mientras realizaba una entrega de comida en Opa-locka. Linares, de 32 años, dejó atrás a su esposa, Katherine Silva, y a su hijo de 8 años. La familia había emigrado con la esperanza de que su hijo pudiera seguir jugando béisbol y alejarse de la crisis económica en Venezuela.
Tragedia en Miami: Un Repartidor Venezolano Asesinado Durante Servicio de Delivery
El 8 de junio, Alejandro salió de su hogar a las 7:10 a.m. para realizar una entrega y nunca regresó. Según relató su esposa, Katherine, ella intentó comunicarse con él varias veces sin éxito. Finalmente, usando la última ubicación del teléfono de Alejandro, Katherine llegó al lugar donde fue asesinado, pero ya era demasiado tarde.
Las autoridades identificaron a Dawayen Bendross, un joven de 22 años, como el responsable del asesinato. Según la policía, Bendross se acercó a Linares cuando este salía de su vehículo, le disparó en el pecho y huyó. Aunque los paramédicos trasladaron a Linares al hospital HCA Florida Aventura, los médicos no pudieron salvarle la vida.
Katherine Silva, devastada por la pérdida de su esposo, cuestionó por qué alguien diagnosticado con esquizofrenia y bipolaridad estaba libre y no internado. “Así como le hizo daño a mi esposo, va a seguir haciendo daño”, afirmó Silva. La tragedia no solo ha afectado profundamente a la familia de Alejandro, sino también a la comunidad venezolana en Miami.
